Dos días de paro en la educación pública.
La decisión de Fenapes de llevar a cabo un paro nacional de 48 horas revela una vez más la profunda crisis que atraviesa el sistema educativo uruguayo. Los docentes, cansados de los constantes ajustes y reformas que deterioran la calidad de la enseñanza y sus propias condiciones laborales, han decidido alzar la voz.
Sin embargo, el gobierno y sus aliados políticos, en lugar de escuchar las demandas de los trabajadores de la educación, prefieren descalificar las protestas y culpar a los docentes por los problemas del sistema.
Es hora de que las autoridades reconozcan la importancia de la educación y trabajen en conjunto con los docentes para construir un sistema educativo de calidad que beneficie a todos los estudiantes.